El problema viene el día que tú has ganado esa batalla, pero la persona que tienes al lado no, él no. Dice estar en "estado de lunes" pero no es cierto, no tiene nada que ver con el día de la semana que marquen las hojas de un calendario lleno de tachones, tiene que ver con más, con mucho más. Tiene que ver con las cosas que te rodean, que un día pueden hundirte y sentir que te llega el agua al cuello, pero conseguir al día siguiente, estando rodeados de lo mismo, ese agua haya bajado hasta tan solo mojarnos ligeramente los dedos de los pies.
Hoy era uno de esos días, en los que esa persona tiene un mal día y tú no puedes hacer nada por evitarlo. Porque esa persona esta mañana no ganó la batalla. Pero tú le mandas tus soldaditos más valientes, los que han sobrevivido para que le ayuden con la suya y el día mejore poco a poco.
¡A la batalla mis pequeños! porque si tú caes, yo caigo.
Hay veces que sin darnos cuenta una persona se convierte en alguien tan importante para nosotros que son impensables nuestros días sin esa persona.
ResponderEliminarNos afecta lo que le pasa porque le queremos, por eso hay que estar siempre, a las duras y a las maduras.
¿Qué tal los soldaditos? ¿Surgieron efecto?
Un besote ♥
Á*